"Don Rafael Latorre tiene (...) un cuadro de regulares dimensiones, titulado "Lo pensaré" que representa el interior de una taberna en la que se encuentra un soldado apurando un vaso de vino al mismo tiempo que hace una proposición amorosa a una buena moza que vacila en contestar sobre tan difícil pregunta. Todo él está bien entendido y de correcta factura.

"Las obras de Latorre son también de las predilectas del numeroso y distinguido público que diariamente acude a la exposición del Centro. La principal de ellas es un interesante cuadro de género en el que desarrolla el joven y laborioso artista una escena de costumbres granadinas, muy bien interpretada. El fondo lo constituye una típica y humilde taberna del Albaicín, servida por una hermosa joven a la que galantea un apuesto dragón de Santiago. Titúlase la obra "Lo pensaré", único error a nuestro juicio del artista, pues el triste semblante de la joven más parece reflejar la emoción penosa de una despedida que la vacilante duda de la mujer solicitada de amores. Las figuras están perfectamente dibujadas, despertando el interés del espectador, pero el fondo es lo mejor por su mucho ambiente y bien distribuidas luces.